Para el ARI lo sensato es cambiar la norma
BUENOS AIRES - MEDIO AMBIENTE
El diputado Sebastián Cinquerruí afirmó que la Ley de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos “ya no tiene sentido” y adelantó que en la práctica “nunca” va a poder ser aplicada. También advirtió que el próximo gobernador bonaerense “va a tener una herencia terrible en materia ambiental” y criticó la falta de voluntad del Ejecutivo provincial para resolver el tema de la basura.
El diputado arista Sebastián Cinquerrui aseguró que “sería sensato” derogar la Ley de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos porque advirtió que “en la práctica no va a poder ser aplicada nunca”.En diálogo con Info Región, el legislador del ARI criticó las modificaciones aprobadas a la Ley de Residuos y señaló que “una vez más queda a las claras el grado de improvisación del gobierno de (Felipe) Solá y sus socios del Frente Para la Victoria y el PJ. No se esta tomando esto como política de Estado sino que esta quedando un tema de tanta importancia, como rehén de los tiempos políticos”.La Legislatura provincial aprobó la semana pasada la suspensión por 210 días del artículo 12 de la Ley de Tratamiento de Residuos, que le daba la potestad al gobernador de establecer a través de un decreto la ubicación de los nuevos rellenos sanitarios. Cinquerrui resaltó que con esta prórroga “el próximo Gobernador va a tener una herencia terrible en materia ambiental”, al tiempo que sostuvo que esta nueva postergación “va a condicionar bastante la política en materia de residuos sólidos para los próximos años”.Insistió en que “no hay voluntad política” por parte del gobierno provincial para solucionar el conflicto por la basura y criticó a Solá porque “es muy fácil decir, con el énfasis que le puso durante la apertura de las sesiones ordinarias, que va a retirar el relleno sanitario de González Catan, para que después la Legislatura prorrogue las definiciones. No hay dudas de que este fue un acuerdo entre el Ejecutivo y el Legislativo”.Enfatizó que a “la Ley habría que derogarla porque ya no tiene sentido y en la práctica no va a poder ser aplicada nunca. De hecho, en dos semanas, hubo dos modificaciones de modo tal que el grado de improvisación que existe quedó en evidencia”. “Lo sensato sería la derogación y llamar a un diálogo amplio y maduro con diferentes organismos de la sociedad para que se realice un debate seriamente sobre cómo vamos a tratar los residuos de acá a los próximos 50 años”, apuntó Cinquerrui.Destacó por otra parte, la participación que deben tener los Municipios en la resolución de este problema ya que remarcó: “Nos llenamos la boca hablando de la autonomía municipal y lo sensato es que se vea en estos casos tan concretos, donde no hay ninguna legislación que prohíba que intervengan en estos temas de tanta importancia, salvo la última que envió Solá”, remató.
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